Ver a una chica hacerse una buena paja y verla correrse es algo que a muchos ponen mas tiesos que el cuello de un cantaor. Y es una paja bien buena porque a pesar de pillarla se sigue tocando hasta correrse.
Ver a una chica hacerse una buena paja y verla correrse es algo que a muchos ponen mas tiesos que el cuello de un cantaor. Y es una paja bien buena porque a pesar de pillarla se sigue tocando hasta correrse.