Si es que últimamente el punch de las fiestas está muy demandado por gente que ya no quieren vivir. Ahora le toca el turno a un ruso que lo da todo, tanto que casi se va para su casa.
Si es que últimamente el punch de las fiestas está muy demandado por gente que ya no quieren vivir. Ahora le toca el turno a un ruso que lo da todo, tanto que casi se va para su casa.